«Empezó a llover a las 13 horas y a las 14.30 horas ya había granizo y no se veía nada a través de los cristales. Ahí ya vi que caía agua del techo de los quirófanos y que estaba inundada todo el área de reanimación», explica a este diario la doctora Teresa Aberasturi, anestesista del Hospital Comarcal Alt Penedés (Vilafranca).
La dana del pasado sábado azotó con fuerza este municipio y dejó inoperativo este centro sanitario, que permanecerá al menos tres semanas cerrado, según la Conselleria de Salut. Todos los pacientes ingresados fueron evacuados a otros hospitales de la zona y el departamento mantendrá abierto, las 24 horas del día, el centro de atención primaria (CAP) Nord de Vilafranca del Penedès, el cual reforzará con más personal hasta que el Hospital Comarcal Alt Penedès recupere plenamente la actividad.
Como explica esta anestesista, que estaba trabajando este fin de semana, en plena dana, pasadas las 14.30 horas, «empezó a salir agua de los váteres». «El almacén estaba inundado con hasta dos metros de agua y estaba todo navegando», dice Aberasturi. De laboratorio se cayó un techo. «Tuvieron que venir hasta ocho camiones de bomberos para drenarlo porque los contenedores de basuras hacían de tapón», relata.
Sin grupo electrógeno
A las 15 horas solo funcionaba Ginecología y un quirófano, «por si hubiera que hacer algo muy urgente». «A las 16.30 o 17 horas ya no funcionaba nada», cuenta la doctora. El grupo electrógeno del hospital (que permiten mantener la autonomía eléctrica en caso de un apagón como el del pasado abril), que se encontraba en el almacén, «quedó totalmente obsoleto». «En las Urgencias y en Radiología también cayó agua del techo», asegura esta médica.
Todos los pacientes fueron derivados poco a poco, entre el sábado y el domingo, a otros hospitales. Según Salut, dos fueron traslados a la Clínica Sant Josep Igualada, cinco a Bellvitge, 25 al Hospital Residència Sant Camil (Alt Penedés-Garraf), seis a Igualada, tres a Sant Boi, cuatro al Vendrell, otros cuatro a Viladecans, tres a la Policlínica Vendrell, dos al Sagrat Cor de Martorell y dos a Ricard Fortuny (Garraf). Además, cinco fueron dados de alta, tres recibieron el alta en el domicilio y uno fue dado de alta en un geriátrico. Para trasladar a los pacientes Salut activó un total de 17 ambulancias.
Aberasturi cree que el hospital puede estar cerrado «entre un mes y dos», pese a que Salut insiste en que en tres semanas volverá a abrir. También los profesionales del Hospital Comarcal Alt Penedés al de Sant Camil para hacer guardias mientras el primero está inoperativo.
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